ARSÉNICO EN EL AGUA DE BERAZATEGUI: ¿MOTIVO DE ALARMA?

El Foro en Defensa del Río de la Plata, la Salud y el Medio Ambiente ha realizado un censo sobre el estado del agua en Berazategui, indagando cuales son las dificultades que percibe la población y cuyos resultados fueron publicados durante las últimas semanas en redes sociales.
La consulta arrojó que el 73,7 % de los vecinos que respondieron tienen diversas dificultades con el suministro del agua, destacándose entre ellos la poca presión (60,8%) y el gusto y olor a cloro (46,5%). El 67,8% de los consultados relacionan esta situación con el exceso de demanda, es decir, la falta de pozos que abastezcan al Distrito, mientras que el 53,6% lo relacionan con la falta de inversiones.
Por otro lado, en los últimos días diversos medios de comunicación de circulación nacional, regional y local comenzaron a alertar sobre la presencia de arsénico, en diversos niveles de peligrosidad, en la provincia de Buenos Aires, principalmente en la región central. Si bien hablar de “arsénico en el agua” parece una situación grave, es importante decir que el agua siempre tiene arsénico por ser este un elemento natural de la corteza terrestre. El problema llega cuando el nivel de concentración es alto.
Además, la presencia de arsénico no se detecta sino es a través del análisis del agua, ya que no tiene olor, sabor, ni color. Por ello no es detectado fácilmente por la población.
El tema se puso en agenda en la región a partir del estudio del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), universidad privada especializada en ingeniería, tecnología y gestión, en el que relanza su Mapa de Arsénico. Allí se señala la presencia de este elemento en Berazategui (Hudson, Ranelagh, Gutiérrez) y Florencio Varela en nivel amarillo, es decir medio. Sin dudar en absoluto de la veracidad del estudio, llama la atención y no debería pasar sin cuestionamiento que algunos medios le den tanto espacio al tema en este momento, mientras el Gobierno Nacional impulsa su repudiable decisión de privatizar AySA y todo lo que esté vinculado al agua a lo largo y ancho del país.
A partir del Censo del Agua realizado por el Foro y del estudio realizado por el ITBA, entendemos que no solo es necesario conocer esas informaciones, sino que además debería ser un llamado de atención para las autoridades locales, que deberían analizar el agua (al menos en los lugares señalados) y tomar las medidas necesarias para, de haber niveles de arsénico peligroso, remediarlo. Según indican los expertos, tratar el agua con arsénico no es un procedimiento complejo y se pueden usar varios métodos, incluyendo filtros de carbón activado, resinas de intercambio iónico, ósmosis inversa, coagulación/filtración y filtros de óxido de hierro. La elección del método depende del nivel de concentración de arsénico en el agua, así como de la disponibilidad de los materiales y la escala del tratamiento (doméstico o industrial).
Por otro lado, tampoco se deben dejar de lado las problemáticas señaladas por los vecinos en el Censo: poca presión, cortes seguidos, alta presencia de cloro, sarro, entre otros, que el Municipio de Berazategui debería atender para ofrecer un servicio a la altura del derecho al agua de su población.
No se trata de alarmarse excesivamente, sino de que el Gobierno Municipal realice los estudios necesarios de manera inmediata y los informe a la población de manera clara, como corresponde.
El futuro es hoy. Mañana es tarde.



